Crítica: 'La ilusión de vivir (Planta 4a)' - (2004)

Es una lástima que esta película halla posado de forma fantasmal en la cartelera bastante débil su h calidad se refiere, como ya se sabe las empalagosas propuesta de Hollywood ocupan casi todos los espacios; aunque no halla llegado a provincias (por el momento) ya la vi (ya se imaginarán que medio utilicé) y quedé maravillado con ella.

Basada en una historia real, nos relata la historia de un grupo de chicos adolescentes de la planta de traumatología de un hospital, ellos son Miguel Ángel, Izan, Dani y Jorge, quien con su alegria desafían al destino y a la tristeza de su discapacidad comportándose como niños, en partes, haciendo travesuras, desobedeciendo órdenes, mostrando entre ellos su afecto como hermanos.

El guión se balancea ubérrimamente como momentos dramáticos y otros cómicos, a lo primero de le adjunta las etapas de vida en ese nosocomio desde cuando llegan los pacientes a ser internados para sus estudios y ver si tienen el cáncer que los deja sin una pierna hasta su salida, si es que corre con suerte, aunque de todas maneras salen sea cual sea; y a la segunda las inquietudes llena de música, deportes y diversión sana típica de la edad del cuarteto extrovertido.

Termina conmoviendo aún más, pues las despedidas son tristes y aquí está bien plasmado con actuaciones y una musicalización que se merecen un 20.

Da lecciones, es optimista y realista a la vez, los personajes (excepto uno) tienen ilusiones que son proyectos futuros que no quieren darlos por truncados lo que quieren es concretarlos cuando salgan con su pierna artificial. En otras palabras en un bonito ejemplo de vida.